Realizamos una receta con otro producto "de siempre" de nuestra huerta: SOPAS DE HABAS.
Nunca había probado estás sopas de Miajadas, pero tengo que decir que me han sorprendido y tendré que repetir. Las sopas tradicionalmente se hacían de "canutillo", es decir, cortando la vaina y grano, o bien sopas de habas de grano.
Recuperamos la información sobre las HABAS que ofrecíamos en la entrada dedicada a la TORTILLA DE HABAS.
Las habas
tiernas o frescas, las podemos encontrar en las tiendas de febrero a
junio, dependiendo de las diferente zonas de nuestra geografía
(española); en nuestra localidad la época de su recolección y por
tanto la mejor época para su consumo, es la primavera.
Las
habas se consumen, o bien los granos (de dos a nueve dependiendo la
variedad) junto a la vaina cuando están frescas, o bien los granos solos
cuando están secos.
Las habas son un producto muy recomendado para personas con problemas de colesterol.
Hay constancia de consumo de habas en Egipto, Grecia y Roma. En la Roma clásica esta legumbre era muy apreciada por sus cualidades afrodisiacas y para potenciar la virilidad.
Algunos Sarcerdotes tenían prohibido comer algunas especies de habas
porque procedían de los difuntos y en sus campos se reencarnaban las
ánimas. De la antigua Roma también procede la costumbre actual, de
introducir un haba en el Roscón de Reyes, una haba servía de ficha de
voto y designaba al rey del banquete o fiesta.
Hablando de habas, no podemos olvidar un clásico miajadeño como es la expresión : ¡Vaya jàba!
Más información sobre las propiedades de las habas, variedades y otras recetas; pincha el siguiente enlace:
SOPAS DE HABAS:
INGREDIENTES:
- Habas frescas (De 250 a 500 gramos).
- Cilantro e hierbabuena frescos.
- Media cebolla.
- Dos dientes de ajo.
- Guinda roja seca (fresca en su defecto).
- Pimentón dulce de la Vera.
- Aceite de oliva.
- Pan asentado del día anterior.
- Litro y medio de agua, aproximado.
- Sal al gusto.
- En una cazuela con un chorro de aceite, freímos la cebolla troceada con un poco de sal.
- Incorporamos las habas troceadas (con vaina).
- Añadimos una cuchara pequeña de pimentón de la Vera. Freímos.
- Cuando tengamos pochado las habas, incorporamos un litro de agua y la guinda seca.
- Machamos los dos dientes de ajos con un poco de sal en el mortero, a continuación, machamos también el cilantro y la hierbabuena troceada. Echamos todo "el machado" a la cazuela y continuamos su cocción a fuego lento.
- Sacamos la guinda de la cazuela para macharla en el mortero; cuando la tenemos machada, la incorporamos nuevamente a la cazuela. Añadimos agua si fuera necesario y sal al gusto, dejamos cocer a fuego muy lento.
- Cortamos el pan y calamos las sopas.
¡BUEN PROVECHO! 
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